|
Castillo de Clavijo |
Una de las batallas más famosas, y a la vez más discutidas respecto a su existencia, es la Batalla de Clavijo. Después de la Batalla de Covadonga, Clavijo es la segunda gran victoria de la Reconquista. El motivo de que se haya puesto en duda su veracidad es que la victoria cristiana en esta batalla se atribuye a la legendaria intervención del apóstol Santiago. Pero dejando al margen esto, no hay porque poner en duda la existencia histórica de los hechos, y sino fue en Clavijo, parece casi demostrado que si hubo una importante victoria cristiana a mediados del siglo IX, como pudo ser la Batalla de Albelda.
|
Cruz de Santiago en el castillo de Clavijo |
El cómo se llegó a esta batalla, parece tener su origen en otro hecho envuelto también de cierta leyenda, como era el pago que los reyes cristianos tenían que hacer a los emires árabes de cien doncellas. Estamos en el año 844, cuando el rey de Asturias, Ramiro I se niega a pagar este tributo y el caudillo musulmán, Abderramán II decide enviar una expedición de castigo. Ramiro I no se echo atrás y salió a buscar a su enemigo, pero al llegar a la zona de Albelda y Nájera se vio rodeado por el ejército musulmán teniendo que refugiarse en el castillo de Clavijo en Monte Laturce, a unos 25 kilómetros al sur de Logroño. En gran semejanza con el sueño que tuvo el emperador Constantino antes de la Batalla del Puente Milvio (y no por eso nadie duda de la autenticidad de dicha batalla), Ramiro I, la noche antes de la batalla soñó con que se le aparecía el apóstol Santiago, el cual le aseguró que vencería y que el mismo le ayudaría en la contienda, bajando de los cielos en un caballo blanco. Los españoles vencieron al día siguiente al grito de Que Dios nos ayude y Santiago. Ramiro I atribuyó su victoria a esta intervención divina y desde entonces se creó el Voto de Santiago, un voto sagrado y solemne con el compromiso de abonar las primicias de las cosechas de cada año y el equivalente al gasto de un caballero en combate para la diócesis de Santiago; y la peregrinación a la ciudad con su nombre en la que está enterrado, para darle gracias por esta victoria y llevarle ofrendas. Es aquí cuando nace la figura de Santiago matamoros y su símbolo de cruz roja en forma de espada que hoy es en parte del escudo de nuestro ejército.
|
Santiago Matamoros |
Otros autores sitúan la batalla en el 856 con Ordoño I; y también hay quienes afirman que la leyenda de la intervención de Santiago fue en el 939, en la Batalla de Simancas con Ordoño II. De lo que no cabe duda, es que fue en el inicio de la formación de los reinos cristianos, cuando a raíz de una gran victoria se instituyó el culto al santo patrón de España.
Como curiosidad, apuntar que el Voto de Santiago se mantuvo en vigor hasta la Constitución de Cádiz de 1812, cuya una de sus primeras medidas fue abolirlo. Los más fanáticos del apóstol afirman que fue a raíz de esto que empezó la caída de España como gran potencia mundial, pero eso por desgracia era un proceso mucho más largo que ya venía de antaño, porque como bien dicen en la película La caída del Imperio Romano, refiriéndose a Roma, pero que también se le puede aplicar perfectamente al viejo león hispano, su caída duró más tiempo que el que existen en total muchos otros imperios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario