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lunes, 2 de agosto de 2010

LOS SUBOFICIALES EN EL EJÉRCITO ROMANO.

Cuando hablamos de las legiones romanas y de sus hombres, lo primero que se nos viene a la cabeza es la figura de un rudo Centurión. Los grandes expertos en la materia lo consideran el primer oficial de la legión, aunque por sus funciones de adiestramiento y como encargado de mantener la disciplina entre sus hombres, bien podríamos ver en él a un suboficial. Pero al margen de esta apreciación, lo cierto es que el Centurión contaba con una serie de subordinados en la centuria, cada uno con sus propias funciones, que si que han sido considerados como los suboficiales de la poderosa maquinaria de guerra romana.


Del mismo modo que ocurría con la falange griega, la legión romana varió a lo largo de la historia, tanto en número, como en táctica, estrategia, tipo de armamento y otros aspectos. Pese a esto, su estructura jerárquica más conocida se mantuvo bastante uniforme, especialmente si nos centramos en los años más esplendorosos de sus legiones, desde la época tardorrepublicana hasta el Imperio.

El suboficial más importante con el contaba un Centurión era el Optio. El hombre que ocupaba este cargo solía ser elegido por el propio Centurión, que lo seleccionaba debido a su experiencia y buen hacer en el campo de batalla. En otras ocasiones eran sus propios compañeros los que solicitaban su nombramiento. El Optio apenas se distinguía en la vestimenta de los otros legionarios por llevar unas plumas o una cresta sobre el casco. Como brazo derecho del Centurión lo ayudaba en todo lo relacionado con la disciplina, táctica y el mantenimiento físico de sus hombres. Debido a su rango estaba rebajado de algunas tareas pesadas y cobraba el doble que los legionarios rasos. Si conseguía destacar en este puesto y sobrevivir varios años, podía llegar a alcanzar el grado de Centurión.

Según la tarea que realizaban se distinguían entre:

-Optio ad carcerem: al frente de la prisión militar de un castra legionis o de un castellum auxiliar.

-Optio candidatus: suboficial que ha sido designado por el jefe de su unidad para alcanzar un rango superior, normalmente el de centurión.

-Optio carceris: suboficial encargado de las celdas de una prisión.

-Optio centuriae u Optio centurionis: lugarteniente de cada centuria.

-Optio custodiarum: suboficial a cargo de la guardia.

-Optio draconarius: en el ejército bajoimperial era el suboficial más veterano de entre los portaestandartes o draconarii.

-Optio equitum: suboficial de la caballería legionaria y de la guardia pretoriana.

-Optio fabricae: encargado de la sección de reparación y fabricación de armas de su unidad.

-Optio navaliorum: suboficial de un navío de guerra, dependiente directamente del capitán.

-Optio praetorii: suboficial al frente de las dependencias del cuartel general de su unidad, tanto principia como praetorium.

-Optio principalis: indicación de la categoría a la que pertenecía.

-Optio speculatorum: optio al frente de los speculatores, soldados encargados de las labores de exploración y espionaje militar.

-Optio stratorum: optio al frente de los stratores o soldados destinados a la función de policía militar.

-Optio tribuni: suboficial destinado como asistente de un tribunus militum.

-Optio valetudinarii: encargado de las instalaciones del valetudinarium u hospital de su unidad.

Otro suboficial era el Tesserarius, de categoría inferior al Optio, recibía órdenes del Centurión a través de este. Cobraba paga y media y su nombre viene de la tessera, que era la contraseña que cada día se fijaba para poder acceder al campamento de la legión, por tanto sus funciones eran las de seguridad.

Por último, y casi tan importante como el Optio, tendríamos al signifer, que era el encargado de llevar la enseña de cada centuria, el signum. Se podría decir que era el abanderado. Además de distinguirse por llevar el estandarte, era fácilmente reconocible por ir cubierto con una piel de animal. Otra de sus funciones era la de tesorero de la centuria, motivo por el cual debía haber demostrado ser un hombre honrado e inteligente. En las centurias, los legionarios tenían una especie de caja de ahorros en la que iban depositando parte de sus pagas y el signifer tenía que llevar un registro con todos estos movimientos. Un signifer que hiciera bien su trabajo podía ascender a Optio. Los había de muchas clases distintas, siendo los más importantes:

Aquilifer en batalla. Nótese que aquí sí que es representado con piel de animal.
-Aquilifer, el signifer más importante pues era el encargado de llevar el estandarte con el águila de la legión. La pérdida del águila para una legión era considerada como un gran desastre, por lo que su portador tenía que gozar de un gran prestigio. Según algunos autores no llevaba piel de animal cubriéndole y portaba un pequeño escudo, llamado parma, sujeto al brazo.

-Draconarius, el signifer de la caballería romana. Adoptado por los romanos desde el siglo II por la influencia de sus auxiliares sármatas y dacios. El draco consistía en una enorme cabeza de dragón hecha de bronce a la que se añadía un tejido corporal artificial similar al de la serpiente y cuya cola estaba compuesta de tela. De alguna forma los romanos consiguieron colocar una especie de silbato en la boca del dragón de modo que este emitía un sonido aterrador cuando cabalgaba.

-Imaginifer era una clase de signifer que en tiempos del Imperio Romano portaba la imago - la imagen - del emperador. Este cargo fue establecido a partir de la implantación del culto imperial durante el reinado de César Augusto. La imago era un retrato tridimensional del emperador hecho de metal labrado que portaba sólo la cohorte principal.

-Vexillarius fue una clase de signifer que servía en tiempos de la Antigua Roma en las legiones de sus ejércitos. El deber del vexillarius era portar el vexillum, el estandarte militar en el que figuraban el nombre y el emblema de la legión en la que servían. El vexillum consistía en una pancarta de tela colgada de un palo o lanza. Se empleaba tanto en unidades de infantería como de caballería.

Cabe decir, que una estructura tan perfecta y compleja como la de la legión romana no hubiera podido funcionar sin toda esta red de suboficiales, los cuales, es importante repetir, eran elegidos por haber destacado durante muchos años en las interminables campañas militares de Roma.

Signifer



Bibliografía: -Yan Le Boec, El ejército romano.

-Monografía en Internet de Mattia Mauro Raffaello Casali Guidugli.

-Wikipedia.

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